@GonzaDiazB
Agenda-setting: “Como consecuencia de la
acción de los periódicos, de la televisión y de los demás medios de
información, el público es consciente o ignora, presta atención o descuida,
enfatiza o pasa por alto, elementos específicos de los escenarios públicos. La
gente tiende a incluir o a excluir de sus propios conocimientos lo que los
media incluyen o excluyen de su propio contenido..” (SHAW, 1979, 96).
De esta manera Shaw definía a la agenda-setting y aquí la
vamos a relacionar con un caso ocurrido en Argentina, más precisamente en La
Plata, donde en los primeros días de abril de 2013 se produjo una de las peores
inundaciones de su historia, que dejó como saldo a más de 50 muertos y a miles
de evacuados que hoy están afectados por un shock post-traumático.
A partir de esta catástrofe, en los medios,
comenzaron a salir diariamente o varias veces a la semana, artículos vinculados
con la investigación de la cantidad de víctimas fatales que ha dejado el
temporal. En muchos de ellos se cuestionó el listado oficial del Gobierno que
indicaba la muerte de 52 personas pero algunas familias denunciaron datos
falsos, por ejemplo Rocío Aguirre sostuvo que el nombre y la edad de sus
padres, Irene del Carmen Arias Burgos, de 66 años, y Raimundo Eliseo Aguirre,
de 62, fueron alterados en los listados oficiales. También la hora y el día del
deceso.
Fue también a través de los medios que se convocó a todo el
país para realizar y efectuar donaciones de ropa, alimentos, colchones y
frazadas para todos aquellos que perdieron sus hogares por el fenómeno. Aquí se
presentó otro problema por pujas políticas, porque se vio a militantes de La
Cámpora, con pecheras identificadoras puestas, ayudando a descargar los
camiones que llegaban desde varias regiones del suelo Argentino. Esto molesto a
la oposición porque para ellos se estaba haciendo campaña política a coste de
una catástrofe.
La economía también rondo en torno a las inundaciones,
las investigaciones y publicaciones periodísticas mostraron como la presidente
Cristina Fernandez de Kirchner, por medio de Cadena Nacional, anunció ayudas
económicas para unas 153 mil personas para los damnificados por las inundaciones
en Buenos Aires, por un total de 400 millones de pesos. Las ayudas
consisten en refuerzos de jubilaciones mínimas y pensiones no contributivas,
asignaciones universales y subsidios para desempleados.
Sin embargo las pérdidas totales rondan los 600 millones de
pesos, cifra que surgió de las estimaciones de los empresarios reunidos en la
Mesa de Reconstrucción de La Plata. El diario “La Nación” tuvo acceso a ese
informe, mostrando hasta donde influyó e influye en su agenda las inundaciones
a pesar de que pasó más de un mes.
Las pérdidas superarían los 6000 millones de pesos, ya
que el cálculo oficial no incluyó unos 40.000 autos siniestrados, más de 400
consultorios médicos y odontológicos damnificados -entre ellos tres hospitales
privados con pérdidas millonarias- y 500 comercios, empresas e industrias no
censadas según los datos aportados por los integrantes de la Mesa de Recuperación
La Plata. Estos datos quizá no les importen demasiado a las personas que no se
vieron afectadas, sin embargo se ve reflejado cómo los medios “puede no
conseguir la mayor parte del tiempo decir a la gente lo que debe pensar, es
sorprendentemente capaz de decir a los propios lectores en torno a qué temas
deben pensar algo”(Cohen).
Hasta el Papa Francisco formó parte de esta agenda
mostrándose apenado por lo sucedido en el país que lo vio nacer y crecer,
ofreció oraciones por el eterno descanso de los fallecidos, al tiempo que
expresó “su paternal cercanía espiritual” con los damnificados y sus
familiares. Asimismo, alentó a las instituciones civiles y eclesiales a
“prestar con caridad y espíritu de solidaridad cristiana la necesaria ayuda a
cuantos han perdido sus hogares o sus bienes personales”.
A pesar de que hayan pasado 2 meses de la tragedia, las
radios, la televisión y la prensa escrita siguen publicando artículos
relacionados a las inundaciones, aunque ya no de la manera que lo hacían en los
primeros días donde no había uno que dejara de hablar y mostrar lo que sucedía.
Por lo tanto en ese momento es donde se ve bien marcado el concepto de
agenda-setting porque son los medios de comunicación, que ante esta urgencia,
pusieron en boca de todos lo que sucedía. Y a medida que fueron pasando los
días fueron aplicando la sedimentación de datos produciendo efectos a largo
plazo, dejando en tela de juicio qué medidas debe tomar el gobierno para poder
evitar una próxima catástrofe.